Imagen de archivo de una mujer.
Soy experto en envejecimiento y este es el desayuno más sano del mundo: lo toman las mujeres centenarias
Según el especialista, únicamente un 20% de la longevidad depende de nuestra genética, mientras que el 80% restante son nuestros hábitos.
Más información: Valter Longo, gurú de la longevidad, advierte: "Si te saltas el desayuno, tu vida será más corta"
En el mundo, existen presuntamente casi medio millón de centenarios. Si concretamos un poco más dentro de esta cifra, encontramos que para el 1 de enero de 2024 había 16.902 personas mayores de 100 años en España. Un dato que no es de extrañar, teniendo en cuenta que los españoles vivimos cada vez más años, siendo la esperanza media de vida de 82,2 años -85 en mujeres y 79,5 en hombres—.
Sin embargo, hay muchos lugares del mundo en los que esta esperanza de vida es aún mayor y uno de ellos son las famosas zonas azules: cinco territorios en el mundo con las personas más longevas de todo el planeta y una longevidad que llega hasta los 100 años.
Algunas de estas zonas azules son islas o aldeas remotas en la montaña, mientras que otros no podrían ser más urbanos ni estar mejor conectados con la vida moderna. Sin embargo, según Dan Buettner, el experto en longevidad que investigó este fenómeno, en todos estos lugares, aunque por caminos distintos, han dado con una fórmula mágica para llevar vidas más felices, activas y largas. Una de ellas es la alimentación y, en concreto, los frijoles.
El desayuno de las zonas azules
Lo cierto es que en países como España, los frijoles y la masa de maíz no forman parte de los desayunos típicos. De hecho, preferimos optar por la bollería y las tostadas con huevo antes que las legumbres, que son más habituales en otros países del mundo, como Costa Rica.
Cada mañana, en Nicoya, los hornos de barro ponen a hervir calderos de frijoles picantes. En otra zona de la cocina, sus habitantes preparan las tortillas de maíz tratadas con ceniza de madera que facilitan la absorción de niacina y aminoácidos esenciales.
Esas mismas tortillas son las que colocan sobre un plato de arcilla caliente, donde se expande hasta convertirse en un disco hinchado que colapsa en una tortilla perfecta. Pero no termina ahí.
El relleno de las tortillas es igual de importante. Esos mismos frijoles son los que mezclan con cebolla, pimientos rojos y hierbas locales. Esta combinación la cocinan lentamente, durante aproximadamente una hora, hasta que las habichuelas estén tiernas. Una vez conseguido, las mezclan con arroz.
Además, los habitantes de Nicoya no realizan esta mezcla todos los días, sino que dejan preparada una gran cantidad de sopa de frijoles de la cual disfrutan durante toda la semana.
Los beneficios del desayuno
A pesar de que la receta no sea nada más que tortillas de maíz rellenas de frijoles, lo cierto es que más allá de las propiedades de ambos ingredientes, lo que observó el experto en longevidad fue el modo de preparación.
Tortillas de maíz. Istock.
La ceniza de madera, con la que es preparada la tortilla, rompe las paredes celulares del maíz, haciendo que la niacina (una vitamina B que desempeña un papel en la señalización celular y la reparación del ADN) esté disponible y libere aminoácidos para que el cuerpo pueda absorberlos.
De por sí, las tortillas de maíz son una excelente fuente de carbohidratos complejos integrales de bajo índice glucémico, además, los frijoles negros son una fuente excelente de antioxidantes —antocianinas, en este caso— los cuales limpian el colon, reducen la presión arterial y regulan la insulina.
La combinación de frijoles y arroz crea una proteína completa, es decir, todos los aminoácidos necesarios para el sustento humano. Los primeros de ellos están llenos de folatos como potasio y vitamina B, mientras que el primero actúa como combustible para el cuerpo.
