Image: Arrasa el cine de EEUU menos convencional

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Cine

Arrasa el cine de EEUU menos convencional

27 diciembre, 2007 01:00

Escena de la película Promesas del este

El cine estadounidense se impone en las taquillas y en las preferencias de los críticos. David Cronenberg alcanza el oro con Promesas del este, sobre las mafias rusas londinenses. Y Jia Zhang Ké convence con Naturaleza muerta.

Promesas del este
Director: David Cronenberg
Actores: Viggo Mortensen, Naomi Watts, Armin Mueller-Stahl, Vincent Cassel. Guionista: Steven Knight
El éxito es un lugar hermoso para quienes lo merecen. David Cronenberg ha conquistado salas y público con Promesas de este, la bellísima película en la que vuelve a brillar su poderío visual y se constata que el género de mafiosos se adecua al lenguaje fílmico como anillo al dedo. Utilizando una paleta de colores cercana al rojo, el canadiense crea un filme hipnótico, en el que casi cuenta tanto esa atmósfera entumecida y rococó que contextualiza la historia como la trama en sí, una alambicada sucesión de traiciones y amores secretos. Viggo Mortensen, en su esquivo papel como sicario de la mafia rusa radicada en Londres, da el magnetismo necesario para que nos creamos su imborrable composición, ese hombre lleno de misterios que esconde detrás de su brutalidad un universo de sentimientos contradictorios. Una figura aparentemente amoral y espectral a la que se enfrenta esa Naomi Watts, testigo y víctima accidental de oscuros sucesos cuya pureza sirve como contrapunto a una historia llena de meandros por los que discurre, sin tregua, la cámara de un Cronenberg en estado de gracia. El gran mérito del cineasta es empañar cada imagen de la película con esa peculiar y torturada forma de mirar el mundo, ya atisbada en Crash o Una historia de violencia, de la que Promesas del este es heredera directa.

Naturaleza muerta
Director: Jia Zhang Ke
Actores: Tao Zhao, Samming Han. Guionista: Jia Zhang Ke, Na Guan
Retratar el fin de una cultura milenaria es, nada menos, el reto que se propone el realizador chino Jia Zhang Ké con esta monumental película, desde luego no por lo aparatoso de su producción o lo agitado de su trama sino por la altura de los sentimientos que se busca reflejar. Poema elegíaco a una civilización que se marchita, simbolizada por la construcción de la fastuosa presa de las Tres Gargantas, Zhang Ke reflexiona sobre la nostalgia y lo imparable del progreso como fuerzas en permanente tensión. Lo hace a través de una fotografía espléndida, morosa en la captación de los paisajes y las expresiones de unos actores casi mudos, que expresan con pequeños gestos los océanos de afecto y desafecto que unen y separan a las personas. Ganadora del Festival de Venecia de 2006, Naturaleza muerta es la apoteosis de una forma oriental de concebir el cine que está cambiando su rostro de una forma definitiva.

Zodiac
Director: David Fincher
Actores: Jake Gyllenhaal, Mark Ruffalo. Guionistas: James Vanderbilt
Plantear un crimen sin ofrecer su resolución. Este es el principal cometido de esta película que parte del esquema del thriller más clásico para minar sus principios desde dentro. A Fincher, popular gracias a éxitos como Se7en y El club de la lucha, no le interesa quién es el asesino sino la propia búsqueda de éste, retratada a través de la obsesión de un hombre sencillo, interpretado por Jake Gyllenhaal, ilustrador de un periódico de San Francisco que abandonará trabajo y familia para descifrar uno de los enigmas criminales más insidiosos de la historia de Estados Unidos. Con estos elementos, Fincher propone una indagación sobre la propia necesidad de la justicia, entendida no tanto como una consecución de un estado verdaderamente justo sino como producto de la necesidad humana por darle una respuesta plausible a todas las cosas. Una bellísima forma de rodar rubrica este gran triunfo del cine estadounidense.

Last days
Directo: Gus Van Sant
Actores: Michael Pitt, Lukas Haas, Asia Argento, Scott Patrick Green. Guionista: Gus Van Sant
Retratar la figura del malogrado músico de rock Kurt Cobain, a medio camino entre lo mitológico y lo esperpéntico, parecía un reto a la altura de un solo hombre, Gus Van Sant, incansable ilustrador de los excesos y las miserias de la cultura juvenil estadounidense. Tras su desesperado filme sobre la matanza de Columbine, Elephant, se fija en esta ocasión en un ídolo caído y perdido, víctima de su propia exuberancia y glamour, al mismo tiempo que encarnación de todos aquellos mitos juveniles que alcanzaron una suerte de perfección antes de tiempo. Quizá, lo más notable del filme sea la forma en que está filmado, deslumbra cómo la cámara se muestra igual de titubeante que ese personaje fatídico, reflejado en sus últimas horas de vida, en un trágico deambular que parece ser el símbolo de todos los pozos a los que puede caer el ser humano. Una película excelente sobre la juventud, la pérdida y la mitomanía.

Inland empire
Director: David Lynch
Actores: Laura Dern, Jeremy Irons, Harry Dean Stanton. Guionista: David Lynch.
Comentaba Almodóvar que, hablando con David Lynch, se había cuenta hasta qué punto él estaba cada vez más interesado por la narrativa mientras el estadounidense se inclinaba por explorar caminos que se refirieran a la pura imagen en movimiento, a la seducción y la lógica ilógica de un arte que no debe hacerse entender necesariamente. Al ver Inland Empire uno entiende lo que decía el manchego. Vuelta de tuerca en el reconocible pero siempre sorprendente imaginario personal de Lynch, la película, como Mullholland Drive, está ambientada en el mundo del espectáculo. Una actriz (Laura Dern) descubre que la película que acaba de interpretar es una versión de una antigua producción polaca. A partir de aquí, ficción, presente, pasado y el espacio físico se diluyen para crear una trama inexplicable que deja el poso unánime de haber asistido a una representación brillante de los rincones más inaccesibles del alma.