Cine español. La fuerza del autor
Una escena de La soledad, de Jaime Rosales
El cine de autor vuelve a triunfar entre los críticos de El Cultural. Al primer lugar se aupa La soledad, la película con la que Jaime Rosales radiografía al español común. Un filme sobre la pérdida y la esperanza que también ha recibido tres nominaciones al Goya, incluyendo mejor película y director. La segunda, Yo, es una pieza única por su fuerza que ha triunfado en festivales extranjeros. Y José Luis Guerín no ha defraudado las muchas expectativas depositadas en En la ciudad de Sylvia, filme exigente y contemplativo sobre el amor a las mujeres. Pere Portabella, veterano del cine de autor, confirma su modernidad con El silencio antes de Bach, una fuga fílmica a raíz de la figura del compositor. Y el terror hace acto de presencia con el taquillazo REC, de Paco Plaza y Jaume Balagueró. Y no nos olvidamos de El orfanato.
Director: Jaime Rosales
Actores: Sonia Almarcha, Petra Martínez, Miriam Correa, Nuria Mencía / Guionista: Jaime Rosales, Enric Rufas
Dice Jaime Rosales que le interesa más "lo común que lo extraordinario". Por ello, su gran mérito, que es la esencia de todo buen cine, es desvelar lo sensacional de la cotidaneidad. La soledad es un filme sobre personas con pequeñas historias, formadas a base de sentimientos, que contienen en sí mismas el germen de toda experiencia humana: empezando por esa "soledad" del título que jamás se retrata de una forma evidente pero cuya sombra se extiende a lo largo de todo el metraje, al igual que sucede con cualquier vida. Ante nosotros se dibuja un mosaico de existencias cercanas y reconocibles, como la de esa Adela (Sonia Almarcha), madre soltera que será víctima involuntaria e insospechada del terrorismo, o la de Antonia (Petra Martínez), viuda con tres hijas que deberá mantener la paz en medio de una agria tormenta al tiempo que se enfrenta a su vejez. Todo ello, desde la óptica de un cineasta atento a la captación del paso del tiempo y su traducción en imágenes, además del valor del sonido, incluso el más insignificante. Porque Rosales no busca complacer al público por la vía fácil ni se aparta un milímetro de su forma de entender el cine como una constante búsqueda de la verdad más allá del artificio técnico y dramático. Tras el éxito obtenido con su debut, Las horas del día (2003), el cineasta volvió a pasar por el Festival de Cannes, donde fue unánimemente celebrado como una de las apuestas más radicales del certamen. Se trata de un filme modélico en su independencia, con el que Rosales además se consolida como renovador al emplear la polivisión por vez primera, un sistema que consiste en partir la pantalla en dos (aún con sujetos que comparten el mismo espacio), un recurso expresivo al que dota de gran fuerza como símbolo de nuestro propio e inevitable aislamiento. No es casualidad que la Academia le haya dado tres nominaciones, un reconocimiento con el que sin duda se quiere dar luz al cine menos convencional.
Yo
Director: Rafa Cortés
Actores: álex Brendemöhl, Manuel Barceló, Aina De Cos, Carme Feliu / Guionista: álex Brendemöhl, Rafa Cortés
En un año marcado por excelentes debuts, se impone Rafa Cortés con Yo, un filme atípico en el que el joven cineasta explora el lugar de más difícil acceso para una cámara, la psique humana. Cortés, con la inestimable ayuda de su coguionista y magnífico protagonista álex Brendemöhl, construye una película que se mueve en el filo de lo real y lo ilusorio, lo sentido y lo vivido, para reflexionar sobre las trampas y los conflictos a que nos conduce nuestra incapacidad para dejar de ser nosotros mismos. Ambientada en una Mallorca espectral, puede entenderse tanto como thriller metafísico a caballo entre lo onírico y lo fantástico como parábola sobre el empeño atávico del hombre por encontrar su lugar en el mundo.
En la ciudad de Sylvia
Director: José Luis Guerín. Actores: Pilar López de Ayala, Xavier Lafitte. Guionista: José Luis Guerín
José luis guerín llevaba seis años sin estrenar, una tardanza especialmente morosa ya que su último filme, En construcción, fue una de las grandes producciones de 2001. Para su regreso, el cineasta catalán contó con el escaparate del Festival de Venecia, que lo acogió en su sección oficial. El resultado es un filme ciertamente peculiar incluso para un director tan poco común como el propio Guerín, una película sin apenas trama en la que seguimos por Estrasburgo a un atolondrado protagonista en su busca de la mujer ideal. Surge así un trabajo profundamente estético, lentísimo y con una dulzura poética fuera de discusión con el que Guerín vuelve a reflexionar sobre conceptos tan afines a su universo como el acto de mirar, lo irracional, o el deseo como motor.
El silencio antes de Bach
Director: Pere Portabella
Actores: Alex Brendemöhl, Féodor Atkine, Georgina Cardona, Christian Brembeck. Guionista: Xavier Albertí, Pere Portabella y Carles Santos.
Hace ya 17 años desde que Pere Portabella, genio y figura, leyenda del cine de autor, no dirigía. Tras ese Pont de Varsóvia (1990), ha vuelto con otra muestra de su insobornable manera de acercarse al cine. Die Stille vor Bach (El silencio antes de Bach) es una película absolutamente indescriptible en la que, alrededor de la figura y la música del insuperable compositor alemán, el cineasta reflexiona tanto sobre el impacto de lo sagrado como sobre la propia música en sí, cuya existencia cambia tanto el significado del sonido como el del ruido y, por supuesto, el silencio. Una colección de estampas aparentemente inconexas, retazos de vida que parecen escogidos al azar pero producto de una exigente que contrapone lo nuevo y lo antiguo generando una fuerte y armónica tensión. Todos estos elementos se confabulan para convertir a esta película en la más bizarra y deliciosa rareza del cine español de 2007.
Rec
Director: Jaume Balagueró y Paco Plaza
Actores: Manuela Velasco, Pablo Rosso, María Lanau, David Vert. Guionista: Jaume Balagueró, Luiso Berdejo y Paco Plaza.
El cine comercial encuentra un hueco con esta REC, que ya lleva recaudados más de cinco millones de euros en la taquilla. Se trata de un filme de género puro y duro, concebido para aterrorizar al personal. Cosa que sin duda logra partiendo de un planteamiento indiscutiblemente original (que tendrá en breve remake estadounidense) al seguir a una insidiosa presentadora de televisión (rama sucesos) en su previsiblemente aburrida noche en compañía de los bomberos de Barcelona. La peripecia es retratada con una sola lente, la que supuestamente lleva el cámara del programa televisivo. Se trata de un recurso que sirve a Balagueró y Plaza, dos hombres bregados durante años en el terror, para demostrar una notable inteligencia visual e incluso cierta virguería técnica. Es lógico que entusiasmara a su paso por el último Festival de Venecia.
Belén Rueda tiene una nariz de oro. Ahí esta su olfato con El orfanato, una película de origen modesto dirigida por el debutante J. A. Bayona. Con más de 24 millones de euros ganados en la taquilla, se ha convertido en la producción de cualquier país más exitosa del año en España. Todo ello, acompañado de críticas elogiosas que han alabado la capacidad del cineasta para crear un clima de terror y contar una historia sin perder la atención del espectador. Un éxito indiscutible cuya trayectoria internacional acaba de empezar.