'Curva España', cuando España descarriló en Galicia
La compañía gallega Chévere investiga el accidente del ingeniero que debía llevar el tren a Galicia en los años 20. Un 'noir' sociopolítico que se estrena este miércoles en las Naves del Español
3 marzo, 2021 09:18“La guerra civil y el franquismo no sólo dejaron cadáveres en las cunetas, también quedaron en la bibliotecas”, afirma a El Cultural Xron, de Chévere Teatro, que regresa este miércoles a las Naves del Español tras el buen sabor de boca dejado en 2017 con Eroski Paraíso. Lo hacen de nuevo con una historia de raíz localista pero cuyos significados trascienden su punto de origen. Hablamos de Curva España, que recuerda la muerte del ingeniero José Fernández España en un accidente de tráfico en 1927. Un hecho que tuvo gran impacto en el subdesarrollo socioeconómico de Galicia, pues este técnico se hallaba en la zona de Verín para estudiar el trazado que debía unir Castilla con el sur galaico. “El progreso que suponía ese tren no llegó, lo que causó un atraso de décadas para la zona, que perdió mucha población, siendo hoy otro rincón de la España vaciada”, explica Xron, autor y director de la obra, en la que reivindica a Eloy Luis André, filósofo, psicólogo, pedagogo, escritor, discípulo de Unamuno y formado en la Alemania a la vera de algún premio Nobel. “Una figura completamente olvidada hoy”.
En la puesta en escena, sin embargo, es un personaje central. “Él hizo un estudio muy documentado y detallado de las razones por las que la línea ferroviaria debía unir Zamora con Vigo a través de Verín. Fue un trabajo que sirvió para presionar a Primo de Rivera”, apunta el inquieto regista de Chévere, compañía con una trayectoria de más de tres décadas a su espalda y galardonada con el Nacional de Teatro en 2014. La presencia del ingeniero malogrado, que trabajaba para una empresa de ferrocarriles, era la respuesta a esa demanda popular: debía chequear in situ la viabilidad del proyecto. Pero la salida de su coche en una curva de la carretera que conecta Gudiña con Verín desvió el itinerario, que terminó, llamativamente, atravesando una zona montañosa despoblada y con una orografía muy complicada para tender vías. “De hecho, hubo que hacer túneles costosísimos”, señala Xron.
A Xron y su ‘compinches’ (Miguel de Lira y Patricia de Lorenzo, ambos en el reparto) les llegó a sus oídos esta historia durante un bolo en Verín. Rápidamente les atrapó y decidieron remangarse con ella para subirla al escenario. Se instalaron unos días en la localidad orensana y recabaron testimonios. “No hay pruebas de algo turbio en aquel accidente pero el hecho de que a los pocos días se abandonara la idea de hacer pasar el tren por allí despertó muchas sospechas. Cundió la leyenda de que fueron ocultos poderes económicos los que se quitaron de encima al ingeniero, y esta se ha ido transmitiendo de padres a hijos”. Las condiciones para que germinara una teoría conspiranoica eran, realmente, idóneas, más si se tiene en cuenta que años después el papeleo del proceso sobre el accidente quedó reducido a cenizas en el juzgado de Orense.
Pero no adelantemos más detalles. Al fin y al cabo, Curva España se desarrolla en clave noir. Sí tiene interés advertir que durante la representación se hibrida el lenguaje cinematográfico (proyecciones de los testimonios, sobre todo) y el teatral, con los actores representando a un equipo de rodaje de un documental sobre los hechos y a personajes como el mencionado sabio Luis André, “exponente de un liberalismo español, anticomunista, republicano, hoy desaparecido”, enuncia Xron, que alerta de que en curvas como la de Verín es donde la construcción de una idea de España moderna y progresista termina partiéndose la crisma.