
Estudiantes durante el recreo. iStock
Al 95,9% de las menores le preocupan los abusos sexuales en la infancia, según UNICEF
La organización, en un ejercicio desarrollado por la Universidad de Sevilla, lanza la IV edición del Barómetro de Opinión de la Infancia y la Adolescencia.
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La economía, la situación política y la contaminación o el medioambiente. Estos son, según el último informe bajo el nombre de ¿Qué opinan los niños, niñas y adolescentes? Barómetro de Opinión de la Infancia y Adolescencia 2023-2024 publicado por UNICEF el pasado 11 de marzo, los principales problemas que preocupan a la sociedad joven. O, por lo menos, así lo indican 6 de cada 10 menores en España.
Aunque entre 2019 y 2020 —cuando salía a la luz la primera edición de este barómetro— la política se identificaba como la preocupación principal, parece que ya no es así. Este 2023-2024 ha bajado a un segundo puesto, con un 14,2%, mientras que la economía ha escalado en inquietud tomando el primer puesto de esta estadística. Por su parte, la contaminación y el medioambiente aparecen en una tercera posición con un 10,5%.
La Covid-19, la guerra o la educación, a diferencia de los resultados de años anteriores, no lideran el podium de la infancia. Y es que estas cuestiones, señala el informe, van disminuyendo en términos de intranquilidad según se avanza en la edad de los encuestados.
Para los adolescentes, la principal preocupación es la economía, seguida por la política y los asuntos relacionados con el trabajo y la perspectiva de futuro. Al contrario, los chicos y chicas de entre 11 y 12 años, centran su angustia en temas como la guerra y la contaminación o el medioambiente.
El género, indican desde UNICEF, también es relevante. Mientras que los chicos perciben mayor preocupación por el ámbito político, las chicas están más interesadas por lo vinculado a la economía. Y, pese a que estas son las cuestiones que más desasosiego generan en las juventudes españolas, son muchas más las que les quita el sueño.
Odio desmedido
Casi 9 de cada 10 chicos y chicas se muestran bastante o muy preocupados por los abusos sexuales en la infancia. De hecho, asegura el informe, se trata de un resultado que pocos cambios ha sufrido en las ediciones anteriores de este barómetro.
En concreto, de acuerdo con los datos recabados por el equipo de investigación de la Universidad de Sevilla —quienes han desarrollado el reporte—, el 95,9% de las encuestadas afirma que está bastante o muy preocupada por esta problemática frente al 84,5% del género masculino.
El terrorismo, las guerras y los conflictos internacionales, el hambre y la pobreza extrema en el mundo son otras de las grandes cuestiones de la infancia. Tampoco se olvidan del acoso o el ciberacoso, el rendimiento escolar o los problemas psicológicos como la depresión o la ansiedad.
Con un menor grado de inquietud, aunque nunca por debajo de 60% de los participantes bastante o muy preocupados, se encuentra el consumo de alcohol, la falta de tiempo de los padres para estar con ellos o la inseguridad ciudadana por medio de robos o asaltos.

Grupo de niños dibujando con tiza el patio del colegio. Istock
Al mismo tiempo, la desigualdad de género, el machismo y la violencia machista caen en términos de preocupación. En 2019-2020 un 89,1% aseguraba que le preocupaba bastante o mucho, ahora tan solo lo cree así un 72,7%.
Crece, además, la diferencia entre la percepción de chicos y chicas sobre este problema: mientras que en la primera edición el 82% de los chicos y el 93% de las chicas mostraban su inquietud, hoy día la cifra es del 60% para los chicos y del 84,9% para las chicas.
Economía y política
De acuerdo con la opinión de los encuestados, 4 de cada 10 adolescentes valora la situación política y económica de España como mala o muy mala, 3 de cada 10 la considera regular y tan solo 1 de cada 10 cree el país se encuentra en un contexto bueno o muy bueno.
En este caso, la clave es la edad del menor y es que, a más años, peor es la percepción. Así lo explica la el barómetro realizado por UNICEF: "El porcentaje de niños, niñas y adolescentes que piensan que la situación es mala o muy mala pasa del 33,1% a los 11-12 años al 54,8% a los 17-18 años".

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Empeoran también, respecto al informe anterior, las valoraciones positivas. Descienden pasando del 14,5% al 6,1. El único porcentaje que crece, aunque tampoco es positivo, es el número de menores que no saben contestar: del 23,6% a los 11-12 años al 6,5% a los 17-18.
La cifra que sí mejora es la referente a la valoración de la situación política y económica de la ciudad o el pueblo donde viven. De hecho, el 31,1% de los jóvenes valoran que este escenario es bueno o muy bueno, lo que resulta tres veces mayor a los datos nacionales.
En ese sentido, subraya el barómetro, existen diferencias en función del nivel adquisitivo familiar. La puntuación se muestra más positiva entre los chicos y chicas con un nivel adquisitivo familiar alto (39,3%), que en quienes tienen uno bajo (22,5%).

Un grupo de estudiantes espera a las afueras del colegio. Istock
Si hablamos de política, el Gobierno y los partidos o representantes políticos se sitúan en los dos últimos escalafones en el listado de las instituciones que más confianza transmiten a los menores (ambos con una puntuación inferior a los cinco puntos). Además, identifican la profesión de político como la peor valorada, seguida por la de creador de contenido o la de esteticista.
Se trata de un resultado que, quizás, se podría explicar con que 2 de cada 3 participantes creen que la mayoría de los políticos son corruptos; pero no es lo único que les distancia de estas labores. Destacan la ausencia de representación o la falta de entendimiento del ejercicio.
Cuestión de género
Entre el 80 y el 90% de los jóvenes considera que la mayoría de las profesiones pueden ser ejercidas tanto por hombres como por mujeres. Sin embargo, cuando se trata de velar de la seguridad en las calles, prevenir delitos y perseguir el crimen, esta cifra baja hasta el 65,5%.
Además de la recién mencionada, las profesiones percibidas como claramente masculinas es el montaje de ordenadores o la gestión de grandes empresas. En cuanto a las mujeres, destaca el trabajo de cuidar niños o personas enfermas, así como la limpieza del hogar.
Aquí, de nuevo, el nivel adquisitivo importa. Y es que aquellos que lo tienen alto son más dados a considerar que la profesión de limpiar casas debe realizarse por mujeres (23%), frente a quienes tienen un nivel adquisitivo medio (18%) o bajo (16%).
Bienestar emocional
Tan solo el 15,4% de los encuestados dice haber sentido soledad siempre o casi siempre durante la última semana. De hecho, 8 de cada 10 niños, niñas y adolescentes sienten que se divierten con sus amistades y que sus familias o tutores les tratan de forma justa siempre o casi siempre.
2 de cada 3 manifiestan que les ha ido bien en el centro educativo. Al mismo tiempo, 6 de cada 10 aseguran que pueden prestar atención, concentrarse y que, de manera habitual, se sienten a gusto y en forma.
Sin embargo, estas cifras no representan la totalidad de la infancia española. Al otro lado, señala el informe, hay un 17,7% de los participantes que afirma haberse sentido triste siempre o casi siempre en la última semana y 2 de cada 10 aseguran no haber tenido nunca o casi nunca tiempo en la última emana para sí mismos.

El 17,7% de los encuestados que afirma haberse sentido triste siempre o casi siempre en la última semana. Istock
Se trata, según los datos, de una problemática que afecta en mayor medida a la población femenina. El 68% de los chicos se siente bien y en forma siempre o casi siempre, frente al 53,4% de las chicas, y el 64,6% de ellos se siente lleno de energía frente al 48,9% de ellas.
De acuerdo al barómetro publicado por UNICEF, son también los chicos quienes disponen de mayor tiempo libre para al ocio: un 58,8% de ellos lo puede realizar con frecuencia frente a un 47,7% de ellas.
En el ámbito emocional, mientras que el 22% de las niñas manifiesta haberse sentido triste siempre o casi siempre, esto solo sucede en el 13% de los niños. Finalmente, en lo que respecta a los elementos más importantes para su felicidad, resaltan el papel de sus aficiones, hobbies, tiempo de descanso y sueño, práctica de deporte y aquellas actividades relacionadas con la familia, amistades y mascotas.