Trasvase del Tajo al Segura. Imagen de archivo
En el ecuador del Ciclo de Planificación Hidrográfica no hay proyectos para aminorar el recorte del trasvase en el 2027
No se han proyectado ni licitado las obras de conducciones necesarias para conectar las desaladoras cuando se producirá un déficit hídrico de 305 hm3.
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Cuando el Gobierno aprobó en enero de 2023 los "Planes Hidrológico de tercer ciclo", de 2022 a 2027 en enero de 2023, anunció que el del río Segura recogía "un total de 4 líneas de actuaciones con un presupuesto aproximado de 814 millones de euros para el periodo" en asuntos como "la mejora del conocimiento, el mantenimiento y la conservación del litoral, la ordenación del territorio, la restauración de ecosistemas, las mejoras en las infraestructuras o los sistemas de alerta meteorológica e hidrológica".
En la mitad de este "tercer ciclo" apenas se ha hecho nada y expertos en la materia como el profesor Joaquín Melgarejo -ahora diputado nacional del PP- auguran que no se va a concluir el periodo con el cumplimiento de estas promesas "ya que no hay nada hecho, ni proyectado ni licitado".
Por ejemplo, la última de las licitaciones realizadas por la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), anunciada el pasado mes de enero fue, en el Consejo Rector del Fondo de Restauración Ecológica y Resiliencia, actuaciones en la cuenca por importe de 24,9 millones de euros, apenas un 3% de los 814 millones prometidos.
Se trata de un asunto grave porque como ya ha venido informando este diario, en 2027 se producirá el gran recorte de caudales de del trasvase Tajo-Segura como consecuencia de la aprobación de los caudales ecológicos. Y la Confederación Hidrográfica del Segura apenas cuenta con un presupuestos anual de 116 millones de euros.
Según explica Melgarejo, ese déficit llegará dentro de dos años a 305 hectómetros cúbicos con las nuevos recortes. "A eso se suma la sobreexplotación de los acuíferos, la pérdida de calidad del agua de las disponibles en una zona deficitaria estructuralmente".
"Y lo peor de todo es que no tenemos ningún recurso sustitutivo porque la desalación no es una opción si no tiene las conducciones necesarias paras para llevar el agua desde Torrevieja o Valdelentisco hasta el azud de Ojós, por ejemplo", añade el profesor.
A esto se suma que no se han realizado las obras prometidas en la prevención de avenidas que se supone fueron comprometidas después de la Dana que asoló la Vega Baja alicantina en 20019.
Entre tanto, desde la CHS se ha anunciado (dentro de esos 24,9 millones) un gasto en la evolución tecnológica de los sistemas automáticos integrados de información hidrológica (SAIIH) de la Demarcación Hidrográfica "mediante la implantación de un sistema de gestión de mantenimiento asistido por ordenador (GMAO) y de un único SCADA para la integración el sistema informático y de comunicaciones por valor de0,7 millones de euros.
Y están pendiente de licitación inmediata la actualización y revisión de la cartografía del rio Segura de las zonas inundables de la Vega Media y Baja por importe de 1,9millones de euros la elaboración de protocolos de alerta hidrológica y un sistema de ayuda a la decisión en el SAIH, por importe de 1,1 millones de euros, también dentro de la misma inversión.
