El 'cripto-empresario' que dio 100.000€ a Alvise declara ante el juez que esperaba "favores futuros" del político
- El juez ordena a los denunciantes del empresario Álvaro Romillo que aclaren, uno por uno, quién les animó a invertir en Madeira Invest Club y cómo.
- Más información: El juez confisca los coches de lujo del empresario que pagó 100.000€ a Alvise y que está investigado por estafa
Álvaro Romillo, el empresario de criptomonedas que pagó 100.000 euros a Alvise Pérez que financiaron su campaña electoral, ha reconocido en la Audiencia Nacional que esperaba favores futuros por parte del político. Asimismo, como ya hiciera ante la Fiscalía, ha admitido que abonó esta cantidad al agitador que acabó convirtiéndose en eurodiputado.
Este miércoles, Romillo, dueño del conglomerado Madeira Invest Club (MIC), ha declarado ante el juez José Luis Calama, que le investiga por una supuesta estafa.
Ahora bien, en esta ocasión, el cripto-empresario ha comparecido en una pieza separada de la causa, en la que se investiga, únicamente, la supuesta financiación ilegal del partido encabezado por Alvise, Se Acabó la Fiesta (SALF), gracias a este pago de 100.000 euros. SALF obtuvo tres escaños en Bruselas en las últimas elecciones europeas. Uno de ellos lo ocupa Luis Pérez, nombre real de Alvise.
El político también estaba citado a declarar —en su caso, de forma voluntaria— este mismo miércoles. Sin embargo, como ya adelantó EL ESPAÑOL, no ha comparecido y ha anunciado en sus redes sociales que se encuentra en Bruselas.
Por otro lado, también hay novedades en la pieza principal de esta causa, en la que se investiga la supuesta estafa cometida por Madeira Invest Club, el chiringuito financiero —en palabras de la Comisión Nacional del Mercado de Valores— propiedad de Romillo y que Alvise llegó a promocionar en un acto en abril de 2024.
El juez Calama, a través de su letrada de la Administración de Justicia, ha ordenado que cada uno de los denunciantes aclare quién les animó a invertir en el MIC.
"Requiero a las representaciones procesales personadas que agrupan a diversos denunciantes a fin de que aporten a la causa denuncia escrita de cada uno de los perjudicados, en la que [cada uno] relate sus circunstancias personales. En particular: edad, estudios, formación profesional y la fuente de su conocimiento de la entidad Madeira Invest Club, así como el proceso que llevaron a cabo para tomar la decisión de invertir en la misma", reza una resolución a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL.
"En concreto, si fue una decisión unilateral o si se les invitó de cualquier manera por los investigados a llevar a caso la misma, si tuvieron contacto personal (telemático o de cualquier otro tipo) con ellos, si llegaron a disfrutar de parte o no de la inversión y si llegaron a poner a su disposición información para sostener la bondad de ésta, más allá de lo que se ofrece a través de la página web [de Madeira Invest Club]", añade el documento.
Fuentes jurídicas explican a EL ESPAÑOL que con este movimiento, la Justicia pretende aclarar en qué casos existen los elementos que dan lugar a la estafa. Esto es, un "engaño bastante", guiado por un ánimo de lucro y que pueda producir un error en el inversor, al que se induzca a aportar dinero en su propio perjuicio.
El propio Romillo, al confesar ante la Fiscalía que había entregado 100.000 euros en efectivo a Alvise, aportó decenas de mensajes entre ambos. En varios de estos chats, Pérez, tanto antes como después de convertirse en eurodiputado, se compromete a, desde el corazón de la Unión Europea, favorecer la imagen de las empresas de su pagador. Llega, incluso, a emplear la expresión "hacer lobby masivo".
Este miércoles, ante el juez, el cripto-empresario ha indicado que no contaba con ningún contrato firmado con Alvise que recogiese estos "favores futuros" que esperaba. Aunque la Fiscalía sí ha aludido, en una de sus preguntas, a las promesas de Alvise de "hacer lobby" en su favor desde el Parlamento Europeo.