El cannabis terapéutico que puede salvar a una empresa del despido de 40 empleados
La empresa Ondara tiene a un cliente extranjero preparado para comercializar la marihuana, pero falta que la Agencia del Medicamento expida el permiso definitivo
28 enero, 2024 07:00Noticias relacionadas
Cuando se escucha la palabra cannabis o marihuana lo primero que se viene a la cabeza es una droga que se fuma al ritmo de reggae. Sin embargo, esta sustancia también se utiliza con fines medicinales. Por ejemplo, sirve de analgésico, antiinflamatorio, relajante muscular, antiemética, antináusea y antitumoral. Hasta el punto de que utiliza en tratamientos de enfermedades como Parkinson y Esclerosis Múltiple o en el dolor crónico de distintas causas. Nada que ver con el otro.
Y es aquí donde aparece la empresa Ondara situada en Garray (Soria) que desde hace años pretende obtener el permiso definitivo para cultivar cannabis de uso medicinal, lo que permitiría retomar la actividad laboral y comercial a esta compañía y evitar el despido de 40 empleados. Lo hace en este pequeño pueblo soriano de unos 800 habitantes.
Ahora todo está en las manos de un posible comprador de esta marihuana, pero para ello lo primero es que la Agencia del Medicamento envíe su certificado de aprobación. En este caso, el cliente que se ha interesado por el producto que se dedica al THC comenzaría su venta y así evitar el despido de los trabajadores. “Este cannabis necesita permisos de verificación y de proceso. Tienen que hacer todo un camino para conseguir la licencia definitiva de cultivo. Tener su producto y sus clientes y saber a quién se va a vender porque esto no son tomates”, explica a EL ESPAÑOL NOTICIAS DE Castilla y León, la secretaria de la Federación de Industria de Comisiones Obreras en Soria, Amor Pérez.
Ondara es una empresa que ya tiene detrás una historia que está dando la vuelta al mundo. Entre otras cosas porque arrancó como un cultivo de rosas. En noviembre de 2021, la empresa Aleia Roses estaba dedicada al cultivo de rosas de calidad, sin embargo, la cosa no salió cómo habían pensado. 14 hectáreas de cultivo que entraron en concurso de acreedores y fue finalmente adquirida por un fondo de inversión. Un mes después Ondara despidió a 151 personas con un ERE de extinción. Así comenzó una carrera de fondo que esperan pueda acabar en los próximos tres meses, plazo que la Agencia tiene para poder dar el OK a su comercialización. Ahí es donde parece el posible salvador en forma de comprador. De esas 14 hectáreas iniciales ahora son tres de cultivo experimental.
De estas plantas, cultivadas donde antes había rosas, se obtiene la flor de cannabis que es procesada en las instalaciones para su exportación como sustancia activa (API) al mercado europeo. Y en este proceso trabajan 20 personas técnicas que se salvaron de la quema del ERE y que ahora trabajan para lograr la esperada licencia.
Ahora mismo hay plazo de tres meses para que la empresa obtenga ese trámite. “Somos optimistas, aunque nos hemos llevado ya tantos palos, que es normal que la gente no pueda tener ilusión”, explica la secretaria de la Federación de Industria de Comisiones Obreras en Soria, Amor Pérez. Normal si se piensa que este próximo mes de abril, se cumplirán dos años en ERTE para 40 trabajadores. En estos momentos está en marcha ya la cuarta prórroga, que se extiende hasta septiembre.
Si finalmente la empresa obtiene el permiso definitivo para comercializar cannabis para uso medicinal, lo primero que hará la empresa es llamar a los empleados que se encuentren en una situación más precaria. “Hay muchas personas que lo han pasado mal, otras se han tenido que buscar otro trabajo”, lamenta.