Este domingo, al fin, acaba de forma oficial el fútbol español la temporada 2016/17. Aunque sea raro, esto no se acaba con las finales de las competiciones, sino con partidos de selecciones. El calendario, tan surrealista como esperpéntico, hace que se tengan que jugar partidos oficiales una semana después de la final de Champions, cuando el aficionado, en general, ha desconectado ya del fútbol de nivel.

A mitad de junio, es decir, diez meses después del inicio de la temporada, y con jugadores que han tenido que interrumpir sus vacaciones, que reanudaran el lunes, para este 'bolo' (aunque oficial) en Skopje, España juega ante Macedonia (20:45 horas) un encuentro que es más una china en el zapato que algo atractivo.

El duelo, correspondiente a la clasificación del Mundial 2018, no ha levantado ninguna expectación y solo valdrá, además de para mantener el primer puesto del grupo G (actualmente empatados con Italia a 13 puntos), como escaparate para muchos jugadores que darán sus últimos coletazos antes de que se abra el mercado. Es la última oportunidad que tienen para encarecerse, aunque prácticamente nadie moverá sus deseos por lo que se haga este domingo en el estadio Felipe II de Skopje.

David de Gea, Álvaro Morata, Diego Costa, Vitolo, Gerard Deulofeu, Jordi Alba... varios jugadores cierran en el país balcánico una temporada sin saber con seguridad si estarán en el mismo equipo la próxima vez que les llame la selección, en septiembre. Ellos serán algunos de los protagonistas del mercado de fichajes que oficialmente no se abre hasta el 1 de julio, pero que desde ya tendrá cada día algún sobresalto con el objetivo de seguir alimentando la gallina de los huevos de oro del fútbol: los millones que van de un lado a otro en verano.

El caso más sonado por el momento es el de Morata, salvador de la primera derrota de la era Lopetegui en el amistoso en Murcia ante Colombia, y que promete dar que hablar en los próximos días. Su año irregular en el Madrid provoca que quiera irse de la capital y el United está a la caza del delantero madrileño y más ahora que Zlatan Ibrahimovic no seguirá al lado de Mourinho.

Allí posiblemente coincida con De Gea, eterno protagonista del mercado de fichajes y también eterno aspirante a la portería del Bernabéu que, salvo sorpresa, solo podrá defender en el partido ante Italia del próximo 2 de septiembre. Otro año más, el portero comienza un verano con rumores de venta al Madrid. A eso se suma este mercado Diego Costa y Vitolo, dos 'atléticos' marcados por la sanción al Atlético. Si los rojiblancos pudieran fichar, ambos ya estarían cerrados, pero la imposibilidad de inscribir jugadores complica los movimientos. Las opciones de cesiones los primeros meses no se descarta y sería la única solución a dos jugadores que cambiaran de aires. Diego Costa incluso lo adelantó el pasado miércoles, criticando a Conte por las formas y asegurando que no continuará en el Chelsea.

Otros dos de los jugadores que tendrá un verano movido será Deulofeu. El catalán ha tenido un papel más de revulsivo del que se le podía conocer en la selección. Al igual que con Bellerín, es otro canterano que podría volver al Camp Nou. O Jordi Alba, al que el cambio de Luis Enrique por Valverde le vendrá bien (él mismo lo reconoció), aunque no es segura su continuidad.

Un partido entre la pereza y la obligación

Con este panorama de escaparate para algunos y pocas ganas para otros, Lopetegui tendrá que regatear a la pereza y confiar en la profesionalidad de sus jugadores para sacar adelante el compromiso en Macedonia. Entre vacaciones, España para visitar por segunda vez Skopje, donde España ya ganó en 2015 por 0-1 en un estadio, el Felipe II, que se aleja de los campos tradicionales de esa zona, la antigua Yugoslavia: es abierto, tiene pistas de atletismo y el público no aprieta como en otras plazas de los Balcanes.

No pensará Lopetegui en el cansancio acumulado y sacará a su equipo de gala, con Ramos y Carvajal disponibles tras la resaca de la Duodécima, la conexión canaria de Silva y Vitolo arriba y el centro del campo de la vieja y la nueva España, con Iniesta y Busquets y posiblemente Isco.  

Salvo catástrofe, España ganará en Macedonia y seguirá líder del grupo empatada a puntos con Italia, que debe ganar a Liechtenstein también este domingo. En un grupo con seis países, el primero va directamente al Mundial y el segundo tendrá que ir a la repesca. Es por ello que más que pensar en lo que se haga en Skopje se tiene que mirar al duelo que decidirá todo el 2 de septiembre ante los italianos en el Bernabéu. Y ese partido se lo pueden perder seis jugadores claves si ven tarjeta amarilla en Macedonia: Piqué, Ramos, Busquets, Thiago, Vitolo y Costa. 

En el último partido de una temporada larguísima (para España, ya que en una semana comienza la Copa Confederaciones), 'La Roja' tiene el deber de ganar en Skopje y cumplir con su deber, ir al Mundial de Rusia de forma directa. Para ello Lopetegui se enfrentará a varios rivales: además de la propia Macedonia, jugará ante el cansancio, las ganas de vacaciones y la desidia que pueden provocar estas fechas.