Salón de Terracota en Casa Gallardo.
El desembarco de Terracotta en el 'restaurante maldito de Madrid': comidas a mitad de precio y un menú de 125 euros
Se trata de la llegada al 'lugar maldito para Martín Berasategui' de este restaurante que ha triunfado en Velázquez con su carta de sabores españoles.
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Se ha llegado a decir que el emblemático edificio Casa Gallardo está maldito, gastronómicamente hablando. Grandes chefs que han destacado en la Guía Michelin, como José Carlos Fuentes, Diego Guerrero, María Marte y, el último de ellos, Martín Berasategui, han protagonizado abruptas salidas del Club Allard, a pesar de conseguir varios de ellos la deseada estrella Michelin.
Ahora lo intenta el Grupo Terracotta, que tras triunfar con su primer restaurante, con el mismo nombre, en la calle Velázquez, se embarca en la aventura que abrir Terracotta Plaza de España en este edificio de 1911 de la calle Ferraz, declarado Bien de Interés Cultural.
La emblemática Casa Gallardo, que tiene el nuevo restaurante Terracotta Plaza de España.
El restaurante cambia de nombre, pasando a ser Terracotta Plaza España. Ubicado en el primer piso de este icono del modernismo, cuenta con cuatro exclusivos salones —Picasso, Dalí, Miró y Goya— que destacan por su amplitud, luz natural y detalles originales del edificio, ofreciendo un ambiente inigualable para reuniones.
El nuevo concepto conserva la elegancia de sus clásicos salones con la calidez de una cocina artesana que recoge una variada carta basada en los sabores españoles de siempre, con el toque sofisticado de la cocina de autor más cuidada y a precios asequibles.
Desde Terracota informan a Madrid Total de que han mantenido el menú degustación, de 125 euros (el precio que ofrecía el restaurante anterior), ya que son muchos los clientes que todavía acuden pidiendo el mismo formato que el antiguo Club Allard, al desconocer que ha cerrado y cambiado de propietarios.
En cambio, ahora el concepto ha cambiado. El ticket medio ha bajado a unos 50 euros por comensal, si optas por pedir a la carta, y sus salones se han convertido en un punto de encuentro ideal para comidas de negocios, celebraciones familiares y, sobre todo, eventos privados.
Su carta, versátil y cuidada, rescata sabores auténticos de la gastronomía española y les da un toque contemporáneo, empleando técnicas tradicionales como largas cocciones y procesos artesanales.
De tartar a croquetas
Entre los platos destacados se encuentran las opciones 'Para empezar y compartir', que incluyen: puerro a la brasa con tartar de gambón, säam de papada ibérica con piña y hierbabuena, gambas crujientes con salsa de mango thai, pulpo a la brasa sobre roca de papas arrugás, o steak tartar de vaca madurada, así como clásicos inalterables como las croquetas de jamón ibérico o de chipirón en su tinta.
En la lista de principales resaltan: el lomo de vaca sobre tuétano y tierra de panko, la carrillera glaseada en sus jugos, el calamar de potera a la brasa con habitas y setas, el magret de pato braseado con manzana asada, así como el lomo de vaca trinchada de 900 gramos.
Cocinero de Terracota.
Para terminar la experiencia, desde el restaurante recomiendan probar el lingote de oro y chocolate, la tarta cremosa de queso o los helados caseros, entre otras opciones dulces.
Cercanía, frescura, calidez y elegancia son los ingredientes de este proyecto que llega de triunfar en el barrio de Salamanca para romper con la 'maldición' gastronómica de Casa Gallardo.
