Ya es oficial: la DGT anuncia cambios para la obtención del carnet A y entrarán en vigor a partir de esta fecha

La Dirección General de Tráfico (DGT) sigue reforzando sus medidas para reducir la siniestralidad en España, con un enfoque especial en los motoristas. Y es que los accidentes de tráfico en los que están involucradas motos siguen siendo preocupantes. Solo en 2024, según las cifras oficiales de la DGT, se registraron 289 fallecidos en accidentes de moto y 11 en ciclomotor.

Estos datos, lejos de disminuir, han ido en aumento en los últimos años, lo que ha llevado a la DGT a implementar una nueva normativa que afecta a los conductores que desean obtener el carnet A. Cabe recordar que este permiso solo pueden solicitarlo quienes ya poseen el A2 (que permite conducir motos de hasta 47 CV), tienen más de 20 años y, por tanto, cuentan con al menos dos años de experiencia en la conducción de motocicletas.

Este permiso habilita para pilotar motos de gran cilindrada, pero a partir de ahora el proceso para obtenerlo será distinto. La DGT ha anunciado a través de sus redes sociales cambios importantes: "Novedades en la formación de conductores con dos órdenes ministeriales publicadas en el BOE", adelantaban. Estas modificaciones afectan tanto a la regulación de los cursos para la obtención del permiso de clase A como a los cursos de conducción eficiente y segura, que ahora estarán bonificados con dos puntos del carnet.

Cambios en la obtención del permiso A

Los cambios en la obtención del permiso A introducen modificaciones clave en la formación de los motoristas. A partir de ahora, el peso de la formación práctica se traslada en mayor medida a la circulación en vías abiertas, reduciendo las horas dedicadas al circuito cerrado.

La DGT considera que los aspirantes al permiso A, al contar ya con el A2 y más de dos años de experiencia, poseen la destreza suficiente en maniobras básicas, por lo que la nueva estructura del curso se compone de tres horas de teoría, dos horas en circuito cerrado y cuatro horas de circulación en vías abiertas. De estas últimas, al menos dos deberán realizarse en carreteras convencionales (con un carril de cada sentido), ya que es en estas vías donde se registra el mayor número de accidentes mortales entre motoristas.

Otra de las novedades más relevantes es la obligatoriedad del airbag tanto para los alumnos como para los profesores. Este elemento de seguridad, que protege el tórax, cobra especial importancia considerando que más del 35 % de los motoristas fallecidos y el 25 % de los hospitalizados sufren lesiones en esta zona del cuerpo.

Además, la formación teórica incluirá conocimientos sobre sistemas de ayuda a la conducción en motocicletas (ARAS), tecnologías diseñadas para mejorar la seguridad en la conducción y reducir la siniestralidad. También se actualizarán los contenidos relacionados con la nueva movilidad, haciendo hincapié en los principales factores de riesgo y en la protección de los usuarios vulnerables.

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Otra medida destacada es que, durante las prácticas en vías abiertas, los profesores deberán realizar el seguimiento de los alumnos en motocicleta, con grupos de un máximo de tres alumnos por instructor. En el circuito cerrado, el máximo permitido será de cinco alumnos por profesor.

Además, para facilitar el acceso a la formación, se permitirá que la parte teórica se imparta de forma online, mediante teleformación o aula virtual. Una vez superado el curso, que deberá estar acreditado por el centro de formación, el aspirante podrá solicitar el permiso A a la DGT. Para que las autoescuelas puedan adaptarse a estos cambios, la normativa entrará en vigor el 1 de julio de 2025.

Cursos de conducción segura y eficiente

Paralelamente, la DGT también ha aprobado una segunda orden ministerial relacionada con los cursos de conducción segura y eficiente, que serán voluntarios y permitirán a los conductores recuperar hasta dos puntos del carnet. Estos cursos estarán divididos en dos categorías según el tipo de vehículo: turismos o motocicletas y ciclomotores.

Dentro de este último grupo, se diferenciarán en función del tipo de vía, con una modalidad para zona urbana y otra para carretera convencional. El objetivo es reforzar la formación en técnicas de conducción que ayuden a evitar accidentes, mejorar la capacidad de respuesta ante situaciones de peligro y fomentar prácticas seguras al volante. En ningún caso se incluirán técnicas de conducción deportiva.

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Para acceder a estos cursos, los conductores deberán tener su carnet en vigor y contar con saldo positivo de puntos. Al completarlos con éxito, recibirán una bonificación de dos puntos, con un límite de 15 y sólo podrán realizarlos una vez cada dos años. La formación tendrá una duración mínima de seis horas, combinando teoría y práctica tanto en circuito cerrado como en vías abiertas.

La parte teórica, de al menos una hora y 45 minutos, se intercalará con la formación práctica para reforzar conceptos clave, siendo obligatorias dos sesiones de media hora al inicio y al final del curso. En cuanto a la formación práctica, durará cuatro horas y 15 minutos e incluirá maniobras específicas adaptadas a cada modalidad de conducción. Estos cursos entrarán en vigor 20 días después de su publicación en el BOE.