Illa de Cortegada (Pontevedra)
El mayor bosque de laureles de Europa está en Galicia: un paraíso natural en medio de la ría de Arousa
En la ría de Arousa (Pontevedra) se encuentra una isla con intenso olor a laurel y a marisco, que forma parte del Parque Nacional de las Illas Atlánticas de Galicia
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En el corazón de Galicia se encuentra un bosque mágico donde la naturaleza despliega todo su esplendor. Sabiendo que la comunidad se caracteriza por el verde intenso de sus montes y su olor a mar, esconde un paraíso entre sus aguas cristalinas y sus bancos marisqueros que es una verdadera joya. La belleza natural de Galicia es incuestionable y por eso queremos hablarte de uno de sus mayores tesoros: el bosque de laureles más grande de Europa situado en la ría de Arousa (Pontevedra).
La illa de Cortegada es el paraíso de la ría de Arousa donde el bosque huele a laurel y a marisco, la combinación perfecta. Es uno de los tesoros naturales del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia (desde 2002). En su interior emerge uno de los bosques de laureles más grandes de Europa para el que fueron necesarias décadas de abandono, lo que le ha valido el sobrenombre de bosque flotante.
Cortegada, la isla de los laureles
Isla de Cortegada, ría de Arousa.
En la zona norte de la illa de Cortegada se encuentran las más de dos hectáreas que conforman el bosque de laureles más grande del continente europeo, con árboles centenarios con 17 metros de altura que forman un ecosistema único para la flora y la fauna. Aquí conviven robles, sauces, avellanos, pinos y eucaliptos.
El laurel es una especie común en el litoral gallego y a lo largo de los cauces fluviales. La illa de Cortegada es el lugar perfecto para albergar esta densa arboleda gracias a la temperatura y humedad que mantiene durante todo el año, permitiendo a los laureles alcanzar alturas y diámetros excepcionales. ¿Cómo llegó a ser lo que es hoy en día? En el pasado, las fincas agrícolas asentadas en el islote estaban divididas por setos de esta planta y, al ser abandonadas, el laurel aprovechó las condiciones del suelo y del entorno para expandirse.
Hoy en día la illa de Cortegada es un refugio de biodiversidad en el que se encuentran hiedras, hongos y líquenes que enriquecen aún más el ecosistema. También es conocida por su estupenda variedad de flora y fauna, como aves, mariposas, erizos, jabalís y lagartos ocelados. Pese a que cuenta con escasa vegetación debido a la baja penetración de la luz solar, existen un total de 45 especies de setas.
Camino vello entre bosques de laural en Cortegada
Una visita a esta isla gallega se puede realizar en menos de dos horas, gracias a sus dos rutas circulares que comienzan y terminan en el antiguo poblado. La primera de ellas recorre el perímetro de la isla por su litoral, mientras que la segunda se adentra en el interior, permitiendo explorar el bosque de laureles más grande de Europa Occidental. Esta última senda no solo brinda una experiencia única entre sus increíbles árboles, sino que también permite descubrir el pasado más increíble de la isla.
Más allá del bosque de laureles
La visita a la illa de Cortegada es una experiencia única que va más allá de su impresionante bosque de laureles. Este lugar exótico y paradisíaco alberga los restos de una antigua aldea, habitada hasta 1910, cuando la isla fue donada al rey Alfonso XIII. En ese momento, se proyectó la construcción de un palacio diseñado por el arquitecto real Ripollés, pero el proyecto nunca se llevó a cabo. Con la llegada de la Segunda República, la isla fue expropiada, aunque Juan de Borbón logró recuperarla en 1958 y posteriormente la vendió a la inmobiliaria con fines urbanísticos. Sin embargo, este plan fracasó gracias a la movilización de los locales en defensa de su patrimonio.
En 2002 pasó a formar parte del Parque Nacional de las Islas Atlánticas de Galicia y en 2007 Cortegada volvió a ser dominio público tras ser expropiada por la Xunta de Galicia, siendo accesible para todos los interesados en descubrir este tesoro natural.
