Los brotes en residencias apremian a España a decidir sobre la tercera dosis de las vacunas
La necesidad de una dosis de refuerzo en los colectivos de riesgo toma forma a la espera de las recomendaciones de los organismos reguladores.
6 agosto, 2021 02:54Noticias relacionadas
El repunte de contagios por Covid-19 en las residencias de mayores es motivo de preocupación España tras conocerse que se han duplicado entre el 19 y el 25 julio, pasando de 597 residentes infectados entre el 12 y el 18 a 1.137 una semana después. Los focos han pasado de 15 geriátricos a 300 en todo el país, llevando al Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas a pedir asesoramiento a la ponencia de alertas sobre estos centros, según confirmaba la ministra Carolina Darias.
El aumento de los contagios lleva aparejado el de la mortalidad, aunque en cifras mucho menores que en anteriores 'olas' de la Covid. Si entre enero y febrero de 2021 se llegaron a contabilizar 800 fallecidos semanales en las residencias de mayores, las muertes aumentan semanalmente de siete a 37. No hay lugar, sin embargo, a la complacencia: hay que echar la vista atrás hasta marzo, en las postrimerías de la grave 'tercera ola' que dejaron las Navidades, para encontrar cifras similares.
Dos factores nos separan de aquél momento. Por un lado, la práctica totalidad de los ancianos residentes llevan vacunados con la pauta completa aproximadamente seis meses. Por el otro, la variante dominante del coronavirus ahora en España es otra, la 'delta', responsable de hasta el 80% de los nuevos casos dignosticados en algunas CC.AA. A lo largo de esta 'quinta ola', la vacunación ha demostrado ser efectiva frente a la variante: los mayores de 70 años apenas han superado el 20% de los hospitalizados, y su mortalidad ha sido inferior al 0,01%.
Tras los contagios viene las hospitalizaciones, UCI y muertes. Siempre. También con vacunas. Muchas menos con vacunas. Pero llega siempre.
— Francesc Pujol (@NewsReputation) July 29, 2021
¿Quieres evitar muertes? Ten incidencia en niveles controlados.
Contagios y fallecidos en residencias de mayores.https://t.co/p7wQFoasvX pic.twitter.com/zsZP5fxcy6
Sin embargo, también se ha cumplido el plazo de medio año en el que las farmacéuticas garantizaban la inmunidad sin necesidad de una dosis booster o 'de refuerzo'. Pfizer abogaba recientemente por que se permitiera introducir una 'tercera dosis' en EEUU, avalada por estudios preliminares en los que se obtuvieron niveles de anticuerpos once veces superiores en comparación con la pauta doble. Israel, el estado más adelantado en la vacunación contra la Covid, ya administra la pauta triple de Pfizer-BioNtech a sus mayores y colectivos vulnerables.
En la Unión Europea, Francia acaba de unirse a Alemania anunciando que se preparan para administrar la tercera dosis a "ancianos y personas frágiles" en septiembre. En España, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se muestra partidaria de "estudiar" dar esta tecera dosis coincidiendo con "la campaña de la gripe". La propia ministra de Sanidad daba por hecho en julio que la dosis de refuerzo tendría lugar, sin atreverse sin embargo a ponerle fecha.
Del lado opuesto, Bruselas recuerda que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) todavía no ha emitido sus recomendaciones con respecto a una pauta adicional más allá de la originalmente aprobada. Y la Organización Mundial de la Salud (OMS) pide no precipitar la tercera dosis en los países desarrollados cuando la mayor parte del planeta no ha recibido la primera: "No podemos aceptar que los países que han utilizado la mayoría del suministro de las vacunas aún hagan uso de más vacunas, mientras que las personas más vulnerables en otras partes del mundo siguen sin protección", apela su director, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
La clave, la inmunidad celular
El concepto de la 'dosis de recuerdo' lleva rondando el proceso de vacunación desde su comienzo: frecuentemente se cita el caso de la gripe, cuyas vacunas se actualizan en función de las cepas que circulan cada temporada. En el caso de fármacos como el de Pfizer, hay indicios de que la respuesta neutralizante de los anticuerpos, la denominada "inmunidad humoral", va decayendo pasados los seis primeros meses, especialmente frente a variantes con mutaciones especialmente efectivas contra ella como la delta. La farmacéutica Moderna también se inclina por esta hipótesis para pedir una tercera dosis "antes de invierno".
Pero el sistema inmune cuenta con otra línea de defensa, la "inmunidad celular": la respuesta de los linfocitos T, las células responsables de "recordar" al coronavirus SARS-CoV-2 independientemente de la variante que se presente. La pauta completa de la vacunación estaría garantizando la resistencia a delta de forma prolongada, pero la situación es más compleja para algunos colectivos de riesgo. Es el caso de los mayores de 65 años que, debido a inmunosenescencia -reducción en la función inmune por la edad- tienen una inmunidad celular "mas difícil de montar", como explicaba Matilde Cañelles, inmunóloga e investigadora del CSIC, a RTVE.
Un reciente estudio de IrsiCaixa y la Atención Primaria Metropolitana Norte del Institut Català de la Salut (ICS) revelaba que la pauta completa de la vacuna generaba "niveles muy bajos" de anticuerpos en ancianos de residencias que no hubieran pasado primero la Covid. "Las personas mayores de 80 años producen niveles más bajos de anticuerpos después de la vacunación, por lo que su inmunidad puede disminuir antes que la de la población general", confirma el Dr. William Petri, profesor de medicina de la Universidad de Virginia (EEUU) en The Conversation.
La situación es aún más acuciante para los inmunodeprimidos: la medicación inmunosupresora inhibe ambas respuestas, tanto humoral como celular, hasta el punto que "a nivel de anticuerpos, es como si no hubieran sido vacunados", según explicaba a EL ESPAÑOL Nayara Panizo, médica del Servicio de Nefrología del hospital y una de las especialistas que abogan por una tercera dosis a los tres meses para los trasplantados de riñón.
Frente a todos estos factores, pesa el hecho de que ningún organismo regulador ha evaluado la verdadera eficacia de la potencial dosis de refuerzo, y qué colectivos deberían recibirla cuando gran parte de la población no ha completado aún la pauta. Por otra parte, el tiempo corre: como recordaba José Luis Barranco, portavoz de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene, la decisión debe tomarse antes de septiembre de modo a no interferir con la campaña de la gripe.