Varios vehículos en la A-5. Europa Press
Atención conductores de la A-5: Madrid corta el paso inferior de Boadilla desde el lunes y ofrece estas alternativas
Los itinerarios alternativos se pueden realizar por el enlace de Yébenes, por la avenida del Padre Piquer y desde la avenida de los Poblados.
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El Ayuntamiento de Madrid se preparará desde el lunes para demoler el paso inferior de la A-5 que conecta con la carretera de Boadilla. La actuación, que se enmarca dentro de las obras de soterramiento, implicará el cierre de la calzada sur (en sentido a Madrid) desde la autovía nacional hacia la calle Seseña. También se clausurará la incorporación a la A-5 en ese mismo sentido desde la calle Seseña.
Así lo ha anunciado este jueves la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno. Lo que sí se mantendrá abierto al tráfico es el paso inferior para conectar norte y sur de la A-5 y la salida desde la A-5 sentido Badajoz hacia Boadilla del Monte.
A partir del lunes, día 24 de marzo, el Ayuntamiento iniciará los trabajos previos para desviar todo el tráfico de la A-5 en el entorno del enlace de Boadilla y poder eliminar el paso inferior de vehículos que enlaza con la carretera de Boadilla bajo la autovía.
Rutas alternativas
Gracias a la puesta en servicio el pasado 1 de marzo de una nueva glorieta en la avenida de los Poblados a la altura de la calle de Pilar, los itinerarios alternativos para incorporarse a la A-5 se pueden realizar por el enlace de Yébenes, por la avenida del Padre Piquer y por la avenida de los Poblados.
El acceso al barrio de Aluche podrá realizarse igualmente por estos tres puntos del viario, así como por las calles de Allende y Villadiego para continuar por la calle Meliloto, evitando así la zona de obras.
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Además, en el enlace de Yébenes también comienzan los trabajos previos para esta actuación. Esto implica el cierre del ramal que conectaba la salida de la A-5 sentido Madrid, con la calle de San Manuel para acceder a la Casa de Campo.
El tráfico de entrada y salida de Madrid, que se desvió a la calzada norte de la A-5 el pasado 10 de febrero, se mantiene por dicha calzada con una limitación de la velocidad máxima de la vía en la zona de obras a 50 km/hora.
El soterramiento de la A-5 es el proyecto urbanístico más ambicioso del Gobierno municipal de José Luis Martínez-Almeida. La idea es crear un gran bulevar verde sobre un tramo de unos 3 kilómetros de asfaltado.
Una vez terminadas las obras, que comenzaron hace unos meses, el tráfico en superficie se reducirá un 90% gracias al túnel construido bajo tierra. La actuación eliminará la frontera de asfalto que, desde 1968, parte en dos el distrito de Latina.
