Álex Salinas en su bar.

Álex Salinas en su bar. E.E.

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Álex Salinas, el hostelero que abre un nuevo bar de tapas en Zaragoza: "Es una apuesta segura, vamos con todo"

Tras su experiencia en otros establecimientos en El Tubo, se ha embarcado en un ambicioso proyecto junto a sus socios Álvaro y Juan Pablo.

Más información: El bar de Zaragoza que arrasa con cuatro tapas por 3,50 euros: tienen más de 60 variedades de pinchos calientes y fríos

Zaragoza
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Una de las cosas por las que Zaragoza atrae a más turistas es por su gastronomía. Principalmente, cualquiera que viaje hasta la capital aragonesa no puede irse sin visitar El Tubo, su famosa zona de tapas. La historia de esta calle es extensa y, aunque cuenta con míticos bares, siguen surgiendo novedades.

Así pues, hace una semana un nuevo local se abrió paso en el centro de Zaragoza. Se llama Poca Broma y es el proyecto de Álex Salinas, Álvaro y Juan Pablo, tres socios que van "con todo". 

La historia de estos no comienza ahora, pues Álex lleva más de 15 años trabajando en El Tubo, sumando experiencia como camarero y dueño de otros locales (son suyos La General del Tubo y Mestiso).

Sin embargo, el propietario reconoce que estar en la calle principal, en las cuatro esquinas, es como jugar en otra liga mayor. “Este local llevaba vacío muchos años, era la tercera vez que lo había intentado pillar y hemos podido desarrollar al final el proyecto”, declara Álex acordándose de los seis meses de obras.

Una vez terminado el trabajo “oculto”, el pasado jueves 13 de marzo abrieron al público para mostrar su oferta: “Gastronómicamente, teníamos la idea muy clara. Tampoco queremos competir contra nuestros propios bares. Hemos hecho una propuesta sin cocina, hacemos muchas cosas frías y alguna que elaboramos nosotros”.

Exterior de Poca Broma.

Exterior de Poca Broma. E.E.

“Hemos empezado con una carta bastante completa y bien formulada a cara de primavera-verano. Luego vamos a hacer cambios para otoño-invierno, utilizando producto de temporada. Iremos viendo qué cosas funcionan y qué no”, continúa uno de los socios del nuevo bar.

Por ahora, se pueden encontrar banderillas, ensaladas, raciones, tapas, hogazas u otras opciones como brioche, bao, empanada... 

Apuesta por el vino y el vermú

El vino y el vermú se convierten en una parte fundamental de su carta, con una propuesta propia. Juan Pablo lleva dedicándose al mundo del vino toda la vida y así han creado su propia marca, un Verdejo que saldrá próximamente.

“El vermú es nuestro, hemos hecho también una sangría. Esos productos llevan nuestra etiqueta para darle una imagen propia al negocio”, añade. No obstante, no quiere que se les encasille en el concepto de vermutería. “Somos un bar de tapas, por eso ponemos taperío en nuestro lema”.

La barra de Poca Broma.

La barra de Poca Broma. E.E.

Eso sí, describe que tienen más de 12 referencias de vermú y “está increíble”. De esta forma, su primer fin de semana esta bebida fue “un éxito rotundo”.

Además, existe la posibilidad de que el cliente se pueda llevar productos a casa, ya sean unas anchoas o una botella de vino.

Grandes expectativas

Con todo ello, estos hosteleros tienen grandes expectativas con Poca Broma: “Sabemos que la economía está complicada, pero somos optimistas. Sabemos que el proyecto está muy bien pensado, que hemos trabajado bastante y hemos fijado todos los escenarios posibles. Creo que es una apuesta segura. Es una aportación a El Tubo y creo que va a gustar”.

“Tengo mucha experiencia en El Tubo, tener locales fuera de las cuatro esquinas te ayuda mucho porque hay gente, pero aquí es jugar una liga mayor”, reflexionaba Álex.

Por ahora, ya es un local que llama la atención. Anteriormente, en ese espacio no había nada y a la gente le sorprende al ver algo nuevo. Además, según explica el propietario, el montaje de la barra de la vitrina está gustando mucho y a la gente le parece bonito el lugar. No obstante, para él lo importante es la comida, que también cree que va a llamar la atención.

En definitiva, Poca Broma llega pisando fuerte, muy en serio y sin espacio para tonterías. “Intentamos hacer las cosas muy concienciados en dar un producto bien acabado y cuidado. Somos serios, pero tenemos ese cachondeo de que nos gusta pasarlo bien”, agrega Álex.