Autorretrato, ca. 1980 @annaturbau - Cortesía de Photographic Social Vision
Muere Anna Turbau, la fotoperiodista que retrató los márgenes de la Transición, a los 76 años
La barcelonesa fue una de las las mujeres pioneras del fotoperiodismo en España, cuya obra destacó por su compromiso social y su profunda sensibilidad.
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La fotógrafa barcelonesa Anna Turbau (Barcelona, 1949) falleció este miércoles a los 76 años, según ha informado la Fundación Photographic Social Vision, representante de su archivo fotográfico. Se trata de una de las mujeres pioneras del fotoperiodismo en España y su obra destacó por su compromiso social y su profunda sensibilidad.
La fundación ha lamentado el fallecimiento de la fotógrafa y ha recordado la incorporación a la Colección Nacional de Fotografia de la Generalitat a través de la adquisición de 23 copias analógicas efectuada por el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC).
Nacida en Barcelona en 1949, Turbau estudió diseño gráfico en las escuelas Massana y Elisava, donde se interesó por la fotografía como forma de expresión, y en 1974 presentó su primera exposición. En 1976, Turbau se instaló en Santiago de Compostela, pasando a trabajar para revistas, y documentando las movilizaciones sociales y políticas surgidas a finales del franquismo y durante la Transición, y en 1979 regresa a Catalunya. Gran parte de su trabajo lo realizó en Galicia, donde consiguió capturar la cotidianeidad gallega de la década de los 70. "Un lugar para ella con el que mantenía un vínculo especial", señala su galería Nordés de A Coruña.
Poblado gitano. O Vao, Pontevedra Anna Turbau 1975 / Copia posterior, 2018. Colección Reina Sofía
Tanto en Galicia como en Cataluña, sus trabajos se centraron sobre todo en colectivos marginales o en movimientos sociales y de manera ocasional, en retratos de personajes del mundo cultural o lugares más lejanos, como Cuba. Así, han pasado filtrados por su lente y su intuitiva mirada, obreros, políticos, gitanos, inmigrantes, internos psiquiátricos, los primeros okupas de Barcelona, presidiarias, mariscadoras, estudiantes, habitantes del rural… y sobre todo muchas mujeres y niños.
"Aquellas personas que habitaron los márgenes y lucharon por sus derechos, su dignidad, por la justicia y el necesario cambio político y social en momentos tan complicados como los últimos años del franquismo y la Transición. Que necesitaban no solo ser documentados, sino que se captase su humanidad, consiguiendo además en ese momento fugaz, imágenes de gran fuerza y belleza", apunta Nordés.
"Todas nosotras sabemos que estaba muy ilusionada en este momento y con ansias por comenzar y retomar varios proyectos que ya no podrán ser, pero nos deja un importante, inmenso y maravilloso legado y desde Nordés, junto con la Fundación Photographic Social Vision de Barcelona, seguiremos trabajando para posicionarlo y promocionarlo como merece; por mi parte, como su primera galería, trabajo para introducirla en el "mundo del arte contemporáneo" (como en su reciente participación en Arco por primera vez), mundo del que no se imaginaba que llegaría a formar parte pero que, por motivos obvios, era inevitable", señala la galería.
